Juzgado de Pozo Almonte decreta el arraigo nacional de militares imputados por apremios ilegítimos

El Juzgado de Garantía de Pozo Almonte dejó hoy –jueves 23 de noviembre– sujetos a las medidas cautelares de arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima a los militares L.A.R.C., S.A.A.V. y J.L.R.A., imputados por el Ministerio Público como autores del delito de apremios ilegítimos. Ilícito perpetrado ayer, en el sector fronterizo de Colchane.

En la audiencia de formalización, el magistrado Raúl Santander Padilla acogió las medidas cautelares solicitadas por la fiscalía por considerarlas adecuadas y proporcionales a los fines del procedimiento. Además, fijó en 90 días el plazo de investigación.

Al resolver, el magistrado Santander rechazó la solicitud de imponer a los militares, además, la prohibición de acercarse al poblado de Colchane, en atención que al imponer la prohibición de acercarse a la víctima “que sabemos que es extranjero, sin domicilio en Chile”, podría dicha medida generar un “tema de carácter  institucional por las funciones que ellos desarrollan, sabemos que el personal militar es derivado a distintas labores en la zona y eso podría dificultar y entorpecer dichas labores dentro de la institución”, razonó.

Según el ente persecutor, aproximadamente entre las 10 y 11 horas de ayer, miércoles 22 de noviembre de 2023, los efectivos del Ejército L.A.R.C. y S.A.A.V. se encontraban realizando labores de fiscalización y vigilancia en el punto de observación fronterizo ubicado en el sector Bofedal, en Colchane. Lugar donde procedieron a controlar a la víctima Z.P.Q., de nacionalidad boliviana, quien hizo ingreso al territorio nacional por un paso no habilitado.

Tras detener a Z.P.Q., los imputados le solicitaron que se tendiera en el suelo y que se desplazar en “punta y codo” por unos 20 metros, mientras lo apuntaban con el armamento militar que portaban. Luego, llamaron al coimputado J.L.R.A., funcionario militar que le ordenó a la víctima que se sacara la polera para golpearlo con un cable en la espalda; a continuación lo empujó contra el suelo boca abajo, le quitó los zapatos y lo golpeó en los pies. Golpiza que fue presenciada y facilitada por L.A.R.C. y S.A.A.V.

Posteriormente, la víctima fue obligada a ponerse de pie y los tres efectivos castrenses lo volvieron a golpear, antes de “darle cinco minutos” para que se devolviera a su país. La víctima, que resultó con lesiones de carácter leve, regresó poco después e hizo la denuncia respectiva ante Carabineros.